El concejal de Hacienda, Benjamín Calero, informaba en rueda de prensa sobre la liquidación presupuestaria de las cuentas municipales correspondientes al ejercicio 2019, así como de los informes trimestrales, una vez pasados por el pleno correspondiente al mes de noviembre. 

En primer lugar, Calero ha explicado que los informes que se vieron en el último pleno reflejan el control y la estabilidad económica del ayuntamiento, cumpliendo con medidas de contención como la reducción de costes de personal, ahorro en servicios de Fiestas, arrendamiento de locales, publicidad institucional o en la licitación de contratos vencidos.

Según los informes trimestrales, el nivel de deuda se sitúa en los 11.200.000 euros, 1 millón menos que en 2019, ejecución del presupuesto en 241.000 euros, y remanente de tesorería de 900.000 euros.  

Por otra parte, el concejal del área ha manifestado que el consistorio cumple con los parámetros básicos de estabilidad presupuestaria y la regla del gasto. Calero ha anunciado un resultado presupuestario de 352.000 euros, siendo el remanente de tesorería negativo en 784.000 euros, cómo consecuencia de la aplicación de 1.233.000 de saldos de dudoso cobro. Se estudiará la procedencia de dichos saldos para poder liquidarlos en la medida de lo posible. 

El nivel de endeudamiento queda fijado en 55,41%, dato muy positivo frente al límite máximo de endeudamiento para las entidades locales, que establece el Ministerio de Hacienda del 110%. 

«La salud económica del ayuntamiento permite hacer los esfuerzos necesarios en esta situación. Todos los datos demuestran el gran trabajo que se está realizando por este Equipo de Gobierno y el Alcalde por contener el gasto, a la vez que se invierte en la ciudad, se acometen mejoras y se amortizan los préstamos», concluía Benjamín Calero.