Itinerario 1

Partiendo desde la Plaza de Santa María, situada a los pies del castillo, nos encontramos con La Casa Grande, el actual Ayuntamiento. Es un antiguo palacio del siglo XVI en el que es de admirar la imponente fachada de 1575 y el patio interior porticado. Del resto de dependencias, de nueva construcción, destacamos La Sala de Plenos, donde se encuentra una reproducción del cuadro de la Batalla de Almansa, pintado al óleo por el artista almanseño Paulino Ruano.

En el centro de la plaza se sitúa la entrañable Fuente de los Patos, que suele ser punto de encuentro de almanseños y visitantes. Desde este punto, podemos admirar la fachada de la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, realizada en el siglo XVI, de estilo renacentista en la que a modo de retablo se representan dos grupos escultóricos importantes: La Anunciación, en las enjutas de la puerta y La Asunción, en la parte superior. Merece la pena contemplar la única torre de ladrillo, construcción barroca del siglo XVIII, así como la fachada de la Capilla de la Comunión, de 1.768.

 

Adentrándonos por la calle Aragón podemos ver las fachadas de Casas Solariegas como la de los Enríquez de Navarra, que es donde se firmó la capitulación de la Batalla de Almansa, y la de los Marqueses de Montortal, levantada en torno a un bello jardín y en cuyo exterior destacan sus rejerías de forja.Esta última casa se abre a la Plaza de San Agustín, en la que se encuentra la actual Casa de Cultura, donde frecuentemente podemos disfrutar las exposiciones que allí se realizan.En esta misma plaza, podemos admirar la fachada barroca de la Iglesia de San Agustín, fechada en 1704 y realizada por Juan Fauquet. Adosado a ésta, se encuentra el Convento de las Monjas Agustinas, fundación de 1609.Continuando por la calle del Convento y adentrándonos en la calle la Estrella, llegamos al Callejón del Moro, desde donde tenemos una perspectiva diferente del castillo, ideal para los entusiastas de la fotografía. Estamos en las callejuelas que recorren el Cerro del Águila, primitivo núcleo urbano de la ciudad.
 
Dispuestos para comenzar la subida al Castillo, entraremos por la antigua Casa del Jardinero, donde nos darán la bienvenida y una breve explicación de como hay que disfrutar de la visita. Esta ha de ser pausada, se trata de subir no solo para contemplar desde el castillo el término municipal, sino para ver el monumento en sí.
 
 
Itinerario 2:
 
 
Desde la Fuente de los Patos nos dirigimos por la calle Virgen de Belén hacia la Plaza de Jaime I o placeta del Cura; aquí tenemos el Teatro Principal, edificio municipal de finales de siglo XIX en el que se realizan numerosos actos culturales.
 
Por la calle del Rosario accedemos a la de Pascual María Cuenca, para encontrarnos al final de ésta con la Capillica del Rosario, desde allí tenemos una vista centrada del castillo, y si estamos en el mes de octubre se encontrará abierto el balcón, y podremos ver a la Virgen del Rosario. El día 3 de Mayo se celebra en esta capilla la tradicional Rifa de los Corderos, a la que acuden numerosas personas que durante las fiestas han adquirido sus papeletas, siendo este un buen momento para bailar un pasodoble al son de la banda de música.
 
Pasando por debajo de la Capillica, nos adentramos en el antiguo Barrio de la Morería, conjunto de calles medievales que estaban situadas a extramuros del núcleo principal, con nombres tan sugerentes como Callejica, o Pedro Leal. Descendiendo por la calle Aniceto Coloma veremos numerosas fachadas de casas modernistas de la burguesía de principios de siglo XX; una de ellas alberga los actuales juzgados, al lado de los cuales se sitúa el Teatro Coliseum, edificio de 1.932, recientemente reconstruido como sala multicine.
 
Siguiendo el recorrido llegamos hasta la Torre del Reloj, construcción neoclásica de 1.780, en la que aparece un bello escudo de la ciudad con elementos rococó. En el Pasaje del Coronel Arteaga se sitúa la Lonja, antiguo Ayuntamiento, construida en 1.800, que alberga una galería porticada. Bajo el balcón central, se destaca un primitivo escudo de Almansa, proveniente del obelisco conmemorativo de la Batalla de 1.707 destruido en 1.868.
 
Continuamos por la peatonal calle de San Francisco, que a cualquier hora del día veremos muy transitada. Desde ella nos podemos acercar al Mercado Central, y si es martes, jueves o sábado por la mañana, dentro del recinto, en el piso superior, podremos ver los típicos puestos de mercadillo ambulante. En esta misma calle se encuentra el Teatro Regio, edificio de 1.930, y al final se sitúa el Jardín de la Glorieta, por el que podremos pasear, o descansar en uno de sus veladores. Entre el 28 de agosto y el 4 de septiembre, la tranquilidad habitual se convierte en bullicio, estamos en Feria, y esta zona se transforma en su recinto, donde numerosas casetas se sitúan alrededor y dentro del mismo. Junto al jardín, se levanta el Convento de los Franciscanos, construcción de 1.660, que consta de una iglesia con claustro exterior muy reformado.
 
Después de recorrer el jardín, accedemos por la peatonal calle Nueva a la Rambla de la Mancha. Es un buen momento para realizar nuestras compras, para lo cual el centro de la ciudad nos ofrece diversas posibilidades; desde un moderno centro comercial, y establecimientos que lo rodean, hasta la pequeña tienda de recuerdos situada a la entrada del castillo. Una vez más nuestro punto de encuentro vuelve a ser La Fuente de los Patos. En este momento ya tenemos una visión diferente de la ciudad y el resto de nuestra estancia la dedicaremos a recrearnos en aquellos lugares o actividades que sean de nuestro mayor agrado.