Bernal ha explicado que tener una mascota, además de un acto de sensibilidad conlleva una responsabilidad con la que hay que cumplir. Por ello adoptar unos hábitos con nuestra mascota repercute en beneficios para la convivencia ciudadana y evita problemas, higiénico sanitarios, de seguridad y del deterioro del entorno.
Por parte de la Policía local se han previsto charlas en los colegios para que los más pequeños respeten las normas y conozcan sus deberes con sus mascotas.
Blanco ha insistido en que han sido muchas las campañas de concienciación que se han llevado desde el ayuntamiento sobre este asunto, pero que todavía hay ciertas personas que no respetan a los demás ciudadanos y al entorno urbano. Debido a las quejas de numerosos vecinos alertando de las suciedades que los animales provocan en las calles se ha decidido que según recoge la Ordenanza Municipal de Medio Ambiente, pasar a realizar las sanciones por la falta de responsabilidad que supone no respetar las normas mencionadas y ello conlleva una sanción de 150 a 750 euros.
El alcalde Francisco Núñez ha explicado que tener una mascota requiere de una serie de responsabilidades que algunos ciudadanos de nuestra ciudad no están cumpliendo. Ha animado a que por el bien de todos, colaboremos en mantener limpias las zonas de juegos infantiles, calles, aceras, parques y jardines de nuestra ciudad.
La normativa en la que han basado las sanciones a imponer está recogida por la ordenanza municipal de medio ambiente Art.91 Apdo. E y art. 318.
El jefe de policia ha indicado que un grupo de policías locales de forma discreta sancionarán a todas aquellas personas que no recojan los excrementos de la vía pública, lleven a sus mascotas sin correa o bozal o no tengan puesto el microchip obligatorio. Las sanciones oscilarán entre los 150 a 750 las leves y de 751 a 1.500 las graves.