Las obras, incluidas dentro del "Plan de Mejoras en Centros Educativos" y con un coste de 23.000 euros, consistían en la demolición de los muros que separaban el muro de los aseos y los cambiadores, para tener como finalidad unos ventanales que permitieran a las educadoras ver lo que en cada momento está haciendo la clase mientras ellas cambian a los niños o están con ellos en el aseo.
Unas obras muy demandadas por las propias educadoras del centro y AMPA y que hoy, por fin, son una realidad. Ya se está trabajando en futuras actuaciones en las demás escuelas infantiles municipales.